22 de octubre de 2012

Un corazón que se apaga

Llamadas, suspiros, miedo, negación, desmayos, tristeza, desesperación, llantos, gritos, lamentos, recuerdos; todo lo que pasa cuando un corazón se apaga.
La muerte llega tan rápido que nadie reacciona. Negamos hasta que pensamos que no, que no va a volver.
Ayer, 21 de Octubre, un corazón conocido se apagó; se fue para no volver.
El dolor llegó a mí en forma de recuerdos de muertes pasadas; pesadillas que vuelven para atormentarme, pero en este caso lo que parece pesadilla es la pura realidad.
Querer despertar e imaginar que ha sido un mal sueño.
Mismo dolor, multiplicado por cada muerte, por cada persona querida que nos ha dejado y vivir su muerte una vez más.
Tengo que agradecer a una persona que me ha dicho algo muy especial que me sacó la primera sonrisa del día: "Aunque la tristeza de saber que no vuelven es enorme, saber que siguen siendo y serán recordados por todas las personas que le quieren alivia...aunque sea un poco... Dicen que la muerte sólo es muerte cuando nadie recuerda y eso no pasará en ninguno de los casos; así que tienes que sonreír porque seguro que es lo que ellos prefieren".

Pensar en ello ayuda a que no haya tanto dolor, aunque sea imposible que desaparezca.


Hay que aprender a vivir con la muerte, a saber que en cualquier momento nos sorprende. A dejar ir a los que se van pero sin olvidarlos, pues es entonces cuando realmente están muertos.
No podemos atarlos para siempre, hay que dejar que se marchen en paz, sin olvidar quiénes fueron, cuanto los queríamos y lo que nos ayudaron.

Vivir con la muerte es saber aceptarla, avanzar, es un acto de valentía y fuerza; vivir con la muerte es aprender a no hundirte.

19 de octubre de 2012

Intuición y otras cosas

Notar los vellos de punta, tu espalda se eriza y un frío la recorre. Tu pecho se encoge y duele, no es un dolor físico, es algo más, algo incontrolable. Tu respiración se acorta pero sin llegar a molestar.
Piensas en qué estará mal, qué puede pasar; miles de situaciones pasan por tu mente, cada una peor que la anterior.
Sin más inspiración, escribo palabras sueltas esperando que alguna concuerde con la siguiente.
Intento pensar en otra cosa, de hecho, hace años lo dejé todo atrás, pero es hora de enfrentar la realidad, mi realidad; de enfrentar el futuro, nuestro futuro.

Sin duda intento cambiar las lágrimas por sonrisas; cambiar el dolor por el amor.
Amor, esa palabra que pocos tienen en cuenta y mueve tanto a las personas.
Esa fuerza que puede hacer cambiar tantas cosas.

"Cuando el poder del amor supere al amor por el poder  el mundo conocerá la paz"
- Nada cambia si no queremos cambiarlo. - Me decías tú.
- Cree en tu intuición si la tienes, es algo poderoso. - Ella me aconsejó cuando tenía miedo
- Tienes la fuerza suficiente para superar tus peores pesadillas. - Cada vez que recuerdo estas palabras una sonrisa y una lágrima aparecen en mi rostro.

16 de octubre de 2012

Un sólo deseo que se pide en voz baja

"Pide un deseo; pero no lo digas en voz alta, porque entonces no se cumplirá".
Siento esa frase clavada en mi pecho, cada día pido el mismo deseo. 
Estando frente a mi ventana, contemplando el frío, la lluvia y el viento que nos muestra el Otoño, escribo una vez más mi deseo; el cual borro rápidamente para evitar miradas curiosas que hagan imposible mi deseo.
Es entonces cuando siento que estoy más cerca de conseguirlo pero, una vez más, la vida me hace esperar hasta encontrarte.
Deseo muchas cosas, pero sólo una es para mi. Deseo que la gente deje de sentir dolor; deseo que cambien  su forma de pensar, que respeten a los demás.

Para mi, sólo deseo encontrar felicidad.



11 de octubre de 2012

La razón

Eres la persona que me saca de sitio. Eres despreciable. Nadie puede creer en ti; ni tú mismo puedes hacerlo.
Estás encerrado en ti y tus demonios te devoran poco a poco. Es imposible salvarte.
Me gusta ayudar a las personas a salir del oscuro vacío en el que se encuentran; pero tú estás a demasiada profundidad, intentando huir de la ayuda, cavando a lo más profundo para que nadie se preocupe en rescatarte.
Nadie te salva de ti mismo. Ni tú mismo sabes donde estás.
Creí en ti, no tuve más remedio que creer y quererte; pero eso terminó.
Todo cambió, ya no soy la niña que creías conocer; esta niña ya es demasiado grande para no darse cuenta del daño que causas.
En tu mirada se refleja el miedo, el dolor, la furia, el odio.
Tú has elegido ser quién eres, eso trae consecuencias.
No te pido que cambie, sino que desaparezcas.

Como una niña armada esperando que el monstruo aparezca

3 de octubre de 2012

La esperanza es lo último en perderse

Creo, espero, quiero, deseo, sueño. Todas esas sensaciones se resumen en una sola palabra: esperanza.
Todos esperamos que algo se cumpla, que cambie.
¿Qué pasaría si no hubiese esperanza en el mundo? ¿Qué pasaría si no hubiera ilusión por cumplir nuestros sueños?
El mundo sería oscuro, no habría felicidad, todos nos conformaríamos con lo que tenemos; nadie cambiaría el mal que hubiese.
Nadie lucharía por mejorar, nadie lucharía por la persona que quiere; no tendría la ilusión de vivir una vida juntos.
Necesitamos la esperanza porque vivir sin esperanza es vivir rendido en una pelea que no terminó.
La esperanza es aquella luz que brilla en la más inmensa oscuridad, es aquello por lo que luchamos.
Perder la esperanza es perder la ilusión de vivir; por eso se dice que la esperanza es lo último que perdemos.

Nadie piensa en la esperanza; pero es algo tan importante como el amor, algo imprescindible.


2 de octubre de 2012

Susurro mis sentimientos

Escucho tu voz, y el miedo recorre mi cuerpo. Tu voz penetra en mi cabeza, rajando mis oídos a su paso. Un frío hace que mi corazón se paralice, tu presencia es mortal para mí.
No quiero verte, escucharte. Desaparece.
Imágenes del pasado vuelven a mi mente ocasionando un dolor indescriptible.
Cada día me decepcionas más. Es inútil que intentes arreglarlo; no hay forma de quitar de mi mente la imagen que me causas.
Ambos sabemos que no te quiero, ni te quise, ni te querré. El día que mueras lloraré, por ti, por tu descanso, porque encuentres la paz que no encuentras ahora.
En tu mirada no existe el amor, sólo miedo y odio.
No voy a decir que te odio, porque no merece la pena; pero si te diré que no me importa que sufras.
Aún así, por más que no quiera, te quiero. Pero no creas que te lo mereces.
Siendo honesta, eres la peor persona que conozco.

Algún día te susurraré al oído todo lo que pienso, esperaré a ver el dolor que sientes, y por último te diré que no es nada comparado con el dolor que me causaste.

Eres el monstruo de mi pasado y mi presente; el monstruo al que temen los niños, pero real.
He de susurrarme a mí misma todo lo que siento para no olvidar el daño que me hiciste y no pensar en perdonarte.

Cada día me pido perdón a mí misma por no quererte, por sentir lo que siento o por no sentir lo que debería.


He aquí un simple blog, otro de los muchos que hay. Que envuelve mis pensamientos, emociones, vivencias. Todo recogido en una pequeña página, perdido en un mundo tan grande. Perdido como una lágrima en la arena, por ello, quien encuentre este pedacito de mis recuerdos, la disfrute ;)

Sigue a mi lado...