Ver como todo se derrumba ante tus ojos, una destrucción inevitable. No puedes actuar, estás al margen pero sabes que deberías haberlo intentado, que igual podrías haber evitado el desastre.
El miedo recorre tu cuerpo y tu mente se para.
El frío te inunda, penetra en tu piel y tu mirada se clava en un punto.
Sientes como si te hubiesen clavado un puñal en el estómago, no puedes asimilar la situación.
"Todo es una pesadilla"; piensas para consolarte pero, despierta, es la realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario